Tras dos semanas intensas se concluyó hoy el Curso de Introduccion al Dibujo Zoológico impartido por Marina Suárez Fernández y Gabriel Bretone Tapia (un servidor) y organizado por el Grupo de Estudio de la Naturaleza mediante las Artes.
Con un sabor agridulce pero muy satisfecho por la experiencia, pude compartir mis conocimientos sobre el dibujo, transmitiendo lo que yo considero como una de las cosas que es un importante ingrediente en mi vida.
Fue mi primera vez oficial como profesor, y nada más y nada menos en una facultad de la UCM: la de Ciencias Biológicas.
En esta tercera edición del Curso, se volvió a incidir sobre uno temática que a todos nos gusta: los animales.
Los alumnos de diversas facultades (Bellas Artes, Biológicas, Veterinaria, Medicina, Geografía e Historia) entusiasmados me confirmaron lo que ya intuía desde hace tiempo: el talento de representar está en todos, solamente la práctica nos convierte en creativos y habilidosos "artistas".
Dando especial importancia al encaje, proporción, volumen y el color volvimos a despertar ese don latente obteniendo resultados muy buenos.
En el feedback, los alumnos mostraron su agrado por la experiencia y sus profesores.
Para clausurar el curso, y como ya es tradición, con una conferencia de un personaje metido en el binomio Arte y Naturaleza. Este año fue el doctor en Bellas Artes, investigador y coordinador del grupo de investigación docente Arte y Naturaleza, Manuel Barbero Richart.
Dando un repaso por la historia de la representación científica mencionó rasgos curiosos de la relación Arte y Ciencia.
Piezas como el rinoceronte de Java de Durero, los dragones voladores, los elefantes y las ballenas fueron analizadas del porqué fueron fundamentales en la evolución del estudio correcto de los animales.
Tras esta experiencia agradezco enormemente al MACV, en especial a Mariano Padilla Cano, en su apoyo por consolidar el curso en su 3era edición; A la facultad de CC Biológicas, por ceder sus instalaciones; Al doctor Manuel Barbero Richart por aceptar ser el conferenciante y brindarnos en esta tarde con tan interesante charla; Y también agradezco enormemente a que pude compartir esa experiencia con una gran dibujante y aún mejor amiga: Marina Suárez Fernández. Trabajando en buen equipo, con humor, siendo cómplices tras casi 4 años de convivencia en nuestra formación universitaria y muchas experiencias compartidas, la alegría de la amistad en el trabajo ha sido una de las más grandes alegrías durante estas dos semanas.
